La emblemática infraestructura, construida entre 1925 y 1931, que ha sido escenario de múltiples producciones nacionales debido a sus hermosos jardines y valiosa construcción, fue postulada para esta remodelación “con el objetivo de ampliar y mejorar la infraestructura, que actualmente presenta un importante deterioro y, a su vez, estructurar un Plan de Uso para este inmueble de Conservación Histórica, que permita poner en valor y proteger sus elementos arquitectónicos y patrimoniales”.
En total, se intervendrán más de 5.875 metros cuadrados del recinto, incluyendo las salas de clases que tiene el palacio, hall de acceso, baños, área administrativa, además de los ascensores y jardines.
Una vez que el municipio cuente con los recursos del programa se tiene estipulado un plan de trabajo a 12 meses, lapso en el cual se desarrollará un estudio topográfico del terreno para verificar los daños que presenta el inmueble, poner en valor objetos de alto significado patrimonial, así como también estructurar un modelo de gestión sustentable y colaborativo para la revitalización del lugar.
Al igual que en la Casa de la Cultura (Palacio Ossa), que también ganó este fondo y recibió los recursos en agosto, la idea es que una vez que concluyan los diseños de restauración y revitalización, sean ejecutados para continuar potenciando las actividades de carácter artístico.
Historia
El Palacio García es uno de los ejes estructurantes más relevantes de Ñuñoa, cuyo trazado y relevancia en el desarrollo urbano de la comuna se remonta al siglo XVII, cuando era conocido como el Camino de Ñuñohue. Actualmente, esta vía expresa es reconocida por su abundante comercio en toda su extensión, así como por su alta concentración de recursos de valor patrimonial y cultural.
Fue construido entre 1925 y 1931, 65 años después que la Casa de la Cultura. Sus arquitectos fueron Rigoberto Correa y Esteban Barbieri. El palacio fue vendido a la Municipalidad de Ñuñoa en 1966, destinándose finalmente, en 1988, a la Corporación Cultural de Ñuñoa, donde hoy se ofrecen talleres de danza, idiomas y canto.
“El Palacio García constituye un lugar emblemático para la comuna, en su calidad de Inmueble de Conservación Histórica, por su mérito arquitectónico y relevancia histórica. Asimismo, como parte del Circuito Patrimonial Ñuñohue, en conjunto con un número importante de Zonas Típicas e Inmuebles de Conservación histórica, además de otros Monumentos Históricos y una zona de Conservación Histórica, le otorgan a Ñuñoa una identidad de valor patrimonial con alto potencial para su desarrollo cultural y turístico. En relación con ello, otros elementos de interés, como el Teatro Municipal y el Teatro de la Universidad Católica, sumado a las áreas verdes de escala comunal e intercomunal, evidencian una potencial red de recursos de valor patrimonial que aportan para consolidar la identidad de Ñuñoa”, se puede leer en la memoria explicativa del proyecto.
En el escrito, además, se explicita que si bien el Palacio García presenta relaciones urbanas de alto potencial, como las anteriormente descritas, la comunidad del Circuito Patrimonial Ñuñohue ha expresado la falta de vínculos, particularmente culturales, entre su barrio y este inmueble de Conservación Histórica, así como con el Palacio Ossa (Casa de la Cultura de Ñuñoa), que también conforma el mencionado circuito.
En este sentido, se concluye que “esta instancia (su remodelación) implica una oportunidad de involucrar a la comunidad del barrio y la comuna con el Palacio García, sus espacios y actividades y, con ello, adaptarlo a las necesidades y expectativas de actores culturales claves de la comuna y el entorno”.