El municipio había llamado a una propuesta pública para concesionar la habilitación, implementación, administración, operación, explotación y mantención del establecimiento de salud, licitación a la que se presentó un oferente.

La oferta contemplaba una inversión de casi $9 mil millones de pesos para las terminaciones, habilitación y equipamiento del establecimiento y un pago al municipio de 300 millones de pesos, además de $95 millones mensuales en prestaciones, lo que se transformaba en descuentos en los copagos de hasta un 30% en las atenciones de salud para los ñuñoínos que cuentan con Tarjeta Vecino, mientras que los afiliados a Fonasa A y B podrían tener gratuidad, dependiendo de la calificación que les otorgara la Dirección de Desarrollo Comunitario.

Los concejales en forma unánime desestimaron la oferta, considerando que el descuento para los ñuñoínos era insuficiente, la concesión por 30 años era muy extensa y manifestando dudas respecto de la solvencia económica del proponente.

La clínica, emplazada en Av. Grecia con Los Jardines, en cuya construcción el municipio invirtió $ 15 mil millones, es un proyecto que fue concebido como una alianza público-privada, en la cual el municipio entrega la infraestructura y un privado se hace cargo de gestionar y desarrollar la atención de salud para nuestros vecinos. Los llamados a licitación hasta ahora han fracasado, incluso se buscó una alianza con el Estado a través del Servicio de Salud Oriente, la que tampoco llegó a buen puerto. Posteriormente se propuso habilitar algunos pisos del edificio, trasladando allí el consultorio Salvador Bustos y el Servicio de Urgencia, lo que no pudo hacerse debido al alto costo que ello implicaba.

En la sesión del martes, los concejales de la Nueva Mayoría rechazaron que el edificio sea traspasado a un privado e insistieron en que la clínica debe ser integrada a la red pública de salud.

El alcalde Andrés Zarhi, quien desde que asumió en octubre pasado ha realizado diversas gestiones ante autoridades de salud, con universidades y con empresas privadas de salud para lograr poner en marcha el establecimiento, lamentó ayer el rechazo a la concesión, lo que obligará a la gente de escasos recursos de la comuna a seguir esperando meses para conseguir una cama en los hospitales, señaló.