El proyecto, que fue encabezado por el Departamento de Reciclaje, dependiente de la Dirección de Medio Ambiente del municipio, logró reunir un 34% más que lo reciclado durante 2018, con 387.049 kilos de vidrio.
De esta última cifra, más de 78 mil kilos correspondieron a la recolección domiciliaria que hizo el municipio, mientras que el resto fue conseguido a través de las 29 campanas de recolección que Coaniquem tiene en la comuna.
“Este aporte equivale a 24 estadías en Casabierta, donde cada niño con su acompañante permanecen en promedio una semana, con todos los gastos pagados (alojamiento, con sus respectivas comidas diarias, asistencia al colegio de Casabierta), mientras se atiende en áreas médicas necesarias para su rehabilitación”, expresó Jorge Rojas, fundador y presidente de Coaniquem, quien agregó que anualmente 8 mil niños son rehabilitados, de los cuales 35, en promedio, pertenecen a Ñuñoa.
“Como municipio es una gran satisfacción poder colaborar con esta gran institución, que año a año rehabilita a miles de niños víctimas de quemaduras. Agradezco a los vecinos que reciclaron, ya que están ayudando a niños y familias que deben recurrir a Coaniquem. Seguiremos apoyando iniciativas solidarias como esta, pues además promueven el cuidado por el medio ambiente”, concluyó el alcalde Andrés Zarhi.