La Comunidad Judía de Chile junto a la Fundación Cisroco hicieron una importante donación a la Municipalidad de Ñuñoa que fortalecerá la red de salud de nuestra comuna: 16 boxes de atención, que fueron utilizados por pacientes covid-19 y como residencia sanitaria por personas que necesitaban aislamiento preventivo.
El presidente de la asociación, Gerardo Gorodischer, explicó que la infraestructura se construyó dentro de la Comunidad Nueva Bnei Israel, ubicada en Vitacura, con fondos recaudados por representantes del pueblo judío residentes en el país.
“Ya como vamos un poco de salida y hemos estado viendo que hay otras instituciones, comunas y personas que necesitan este tipo de ayuda, hemos estado buscando a través de las distintas municipalidades que estaban interesadas en poder recibir esta donación y nos acercamos a la Municipalidad de Ñuñoa, con la cual la comunidad judía en Chile tiene una historia de años”, comentó.
“Hay una serie de instituciones que nacieron y que vivieron en Ñuñoa y después se fueron trasladando”,
Por ejemplo, en nuestra comuna se ubicó por décadas el Instituto Hebreo; además, por más de 60 años ha estado la Bomba Israel (Avenida Grecia Nº2483).
El alcalde Andrés Zarhi, agradeció “enormemente” esta donación indicando que “es una gran ayuda para nuestros vecinos ya que los boxes se podrán equipar con insumos médicos, pero también estarán disponibles para que las personas que no puedan realizar la cuarentena o el aislamiento necesario en sus hogares lo hagan en esta instalación”.
El Comité Israelita de Socorro (Cisroco) es una institución constituida el 15 de agosto de 1939, que nació con el objeto de acoger a los judíos que llegaron a Chile huyendo de la persecución en Alemania.
Entrega de cantimploras a establecimientos de la comuna
También, la semana del 14 de septiembre, las escuelas especiales Aurora de Chile, Hellen Keller y Amapolas recibieron de parte de la rama de scout de Escultismo de Extensión e Inclusión, una donación de 150 cantimploras.
Los implementos buscan promover el acceso al agua de cada estudiante, para facilitar el desarrollo de hábitos de higiene, como es el lavado de manos permanente, sobre todo en el contexto de pandemia que estamos viviendo.
Estas cantimploras, además, favorecen la autonomía de los estudiantes y apoyan a las familias en los momentos de desplazamiento.
La campaña se ha iniciado en Ñuñoa, por parte de esta rama de Escultismo, al ser nuestra comuna pionera en educación especial.